Conversar con los clásicos
¿Contra quién filosofa un autor?
¿Qué es la ambigüedad?
La sabiduría de lo incierto (primer capítulo de El arte de la novela de Milan Kundera, titulado La desprestigiada herencia de Cervantes).
Emmanuel Lévinas:'El tiempo y el otro.
La cuestión no es si nos gusta, sino si nos interpela. ¿Vas a tener insomnio esta noche?
La decepción y la derrota.
René Girard. La violencia y lo sagrado. Hay que mantenerse en tono menor . Lo sagrado es peligroso.
El cristianismo nos dice: ¿dónde buscan ustedes a Dios? ¿en el cielo, en el templo, en el socorrer a la víctima? «Para mí, lo importante en el cristianismo no es la cuestión de lo sagrado, es la cuestión de lo santo. Creo en la parábola del 'buen samaritano'. En la ética. En el socorrer. En el estar ahí. En la respuesta compasiva que damos aquí y ahora al sufrimiento del otro.»
Lluís Duch: Dios no es un a priori metafísico, es un a posteriori ético.
Filosofía del perdón
Uno de los grandes temas de la ética hoy debería ser: el perdón, la compasión (frente a la empatía) y la vergüenza.
Solo se puede perdonar lo imperdonable (Derrida). El perdón va más allá de las leyes y aparece cara a cara entre la víctima y el verdugo. Es un don. Solamente la víctima puede perdonar cara a cara con el verdugo.
Vladímir Jankélévitch matiza a Derrida: sí que hay una condición para el perdón; y es el arrepentimiento y solicitud de perdón por parte del que ha cometido la falta. Si no hay esa voluntad por parte del verdugo, entonces no hay perdón.
Ser ético es estar ahí. Dar apósitos para las heridas. Esto lo aprendí leyendo 'Nemesis' de Philip Roth. Acompañar. Eso es la compasión.
La sabiduría de lo incierto
Relectura sugerida: el fragmento de Ser y tiempo de Heidegger en el que el autor comenta La muerte de Iván Ilich de Tolstoi.
El auténtico drama humano es continuar viviendo, saber que otros ya no están y no volverán. Esa es la cuestión, y esto es lo que Heidegger ignora completamente.
Compasión tiene que ver con la acción con la que acompaño el sufrimiento del otro . ¿Cómo voy a a acompañarle? Como los últimos versos de las Flores del mal de Baudelaire recitados por Jorge Semprún en el lecho de muerte de su maestro Maurice Halbwachs en Buchenwald (La Escritura o la vida): Oh muerte, viejo capitán, es hora de partir, levantemos el ancla.